"20 años no es nada" que dijo Gardel, sieeee caraaaaa!!!! pero en cocina, es sin duda una vainita...
Este gran caballero, excelente cocinero y chef de su propio restaurante desde hace 15 años, (que por cierto muy pocos cocineros venezolanos de nuestra generación pueden ser acreedores de esta osadia) será "el" Anfitrión del SIG 2009,(SALON INTERNACIONAL DE GASTRONOMÍA).
Es un cocinero que desde sus pininos tuvo claro qué quería hacer, hacia dónde quería ir y está muy lejos de admitir que ya llegó. Es por eso que con mucho esfuerzo, trabajo y constacia, se ha ganado a pulsito el respeto de sus colegas, amigos y clientes
Fue pasante de los chef franceses más importantes de la época de oro en la restauración caraqueña. Ellos no sólo lo inspiraron y lo auparon a seguir adelante, sino que vieron en él a un gran cocinero lleno de talento y poseedor de un gran respeto por el oficio a pesar de su juventud; y la verdad, hoy certifico que no estaban equivocados. :)
A lo mejor llegó a Barquisimeto por muchas razones, pero la que yo sé y cobra mayor fuerza es que fue por amor, amor que se convirtió en familia, y gracias a el gran apoyo incondicional de esa hermosa mujer "Carmela" es que sin duda este cocinero ha podido volar tan alto y hoy en día disfrutar con extrema sencillez y gran humildad las mieles del éxito logrado por ambos.
Es un Guaro de corazón, y fue el primero en abrir un restaurant de gran altura en el estado Lara. Se entregó con respeto a un público ávido de buena mesa; innovó ofreciendo varias tendencias dentro de un mismo recinto, lo que no trajo las mejores críticas de algunos caraqueños que se auto dicen sibaritas, pero fue aplaudido por los guaros gurmets, complacidos al sentir que, por fin, alguien se atrevio a ofrecer de lo bueno lo mejor en un hermoso local, confortable y siempre a la vanguardia de las modas del mundo. En"El círculo" se consige todo lo que espera un comensal: buena mesa y buen servicio.
Francisco, sin proponérselo, ha hecho labor de patria porque ha tenido que empezar desde cero, como todos los que alguna vez hemos estado al mando de un restaurant en este país. Ha formado una brigada a la que ha transmitido su experiencia y conocimiento sin ningún tipo de egoísmo; eso, queridos amigos, no se ve en todas partes. Él ha construido, con esfuerzo y humildad, el sueño que se quiere hacer realidad y el restaurant al que todos queremos ir.
Fue un gran privilegio para mí haberle acompañado el año pasado en lo que fue nuestra ponencia para cerrar el SIG, "Sublime ordinariez".
Es un cocinero que desde sus pininos tuvo claro qué quería hacer, hacia dónde quería ir y está muy lejos de admitir que ya llegó. Es por eso que con mucho esfuerzo, trabajo y constacia, se ha ganado a pulsito el respeto de sus colegas, amigos y clientes
Fue pasante de los chef franceses más importantes de la época de oro en la restauración caraqueña. Ellos no sólo lo inspiraron y lo auparon a seguir adelante, sino que vieron en él a un gran cocinero lleno de talento y poseedor de un gran respeto por el oficio a pesar de su juventud; y la verdad, hoy certifico que no estaban equivocados. :)
A lo mejor llegó a Barquisimeto por muchas razones, pero la que yo sé y cobra mayor fuerza es que fue por amor, amor que se convirtió en familia, y gracias a el gran apoyo incondicional de esa hermosa mujer "Carmela" es que sin duda este cocinero ha podido volar tan alto y hoy en día disfrutar con extrema sencillez y gran humildad las mieles del éxito logrado por ambos.
Es un Guaro de corazón, y fue el primero en abrir un restaurant de gran altura en el estado Lara. Se entregó con respeto a un público ávido de buena mesa; innovó ofreciendo varias tendencias dentro de un mismo recinto, lo que no trajo las mejores críticas de algunos caraqueños que se auto dicen sibaritas, pero fue aplaudido por los guaros gurmets, complacidos al sentir que, por fin, alguien se atrevio a ofrecer de lo bueno lo mejor en un hermoso local, confortable y siempre a la vanguardia de las modas del mundo. En"El círculo" se consige todo lo que espera un comensal: buena mesa y buen servicio.
Francisco, sin proponérselo, ha hecho labor de patria porque ha tenido que empezar desde cero, como todos los que alguna vez hemos estado al mando de un restaurant en este país. Ha formado una brigada a la que ha transmitido su experiencia y conocimiento sin ningún tipo de egoísmo; eso, queridos amigos, no se ve en todas partes. Él ha construido, con esfuerzo y humildad, el sueño que se quiere hacer realidad y el restaurant al que todos queremos ir.
Fue un gran privilegio para mí haberle acompañado el año pasado en lo que fue nuestra ponencia para cerrar el SIG, "Sublime ordinariez".


